Una gran frase de William James en la que nos pone de manifiesto que el estado emocional que refleja una persona, en un momento dado, puede llevarle o no a alcanzar la meta que se ha fijado. El estado de ánimo de un emprendedor, aplicado a los negocios, influirá en gran medida en su forma de afrontar el día a día, incidiendo en su éxito final.
«El pesimismo conduce a la debilidad, el optimismo al poder»