Hoy en día parece que el marketing online sea la única disciplina del marketing. Por todas partes vemos servicios, artículos, expertos, cursos, y libros relacionados con ese tema. Sin duda el marketing online ha supuesto una gran revolución, gracias a los avances tecnológicos en Internet. Lo que le hace ser más barato, rápido (en unas pocas horas ya se puede lanzar una campaña), y eficaz (por su gran capacidad para segmentar y medir resultados). Sin embargo esto no quiere decir que con estar presentes en Internet ya esté hecha toda la labor de marketing. Pero precisamente por este boom del marketing online hoy en día las empresas cometen muchos errores en su estrategia y acciones de marketing. Por eso desde Emprendedores y Negocios hemos recogido este vídeo sobre errores de las empresas en marketing.
«El marketing online es un complemento, no un sustituto del marketing tradicional»
Como nos dicen en el vídeo, hoy en día las empresas piensan que la parte online es un sustituto de la parte tradicional, y no es así. Internet es un complemento, un medio nuevo con sus propias características como lo fue la radio o la televisión. Sin embargo muchas empresas confunden el medio con un fin, y por eso cometen tantos errores en el área de marketing. Al no prestar atención a algo básico como elaborar un buen plan de marketing que les guíe en las acciones que realicen en los diferentes medios, sea a nivel online u offline. Entre los errores más habituales están los siguientes:
- No segmentar, es imposible pretender abarcar todo el mercado. Ni a nivel publicitario podemos llegar a todo el mercado, porque sería muy costoso, ni podemos crear un producto o servicio que sea satisfactorio para todos los públicos. Al final en el marketing, como en tantas otras áreas de la empresa, tenemos que elegir. Y para ello debemos de centrarnos en la parte del mercado que sea más rentable y que podamos defender mejor de la competencia. Y una vez tengamos claro nuestro segmento de mercado tenemos que conocerlo muy bien para poder satisfacerlo lo mejor posible de cara a fidelizarlo. Sólo así podremos sobrevivir en el mercado a largo plazo.
- No vigilar a la competencia, en especial cuando el mercado es maduro y no crece mucho. En esa situación las empresas se ven obligadas a robar cuota de mercado las unas a las otras. Por lo que las acciones de una condicionarán al resto, por ejemplo en el caso de una bajada de precios para captar clientes a la competencia. Pero a la hora de vigilar hay que tener en cuenta no sólo a la competencia más directa o cercana, porque hoy en día con Internet las barreras geográficas han desaparecido. Por lo que dependiendo de nuestro tipo de negocio puede que incluso aparezcan competidores de otros países.
- No tener un plan de marketing sin duda es el error más habitual en especial entre las empresas más pequeñas. Tampoco es necesario hacer complejos planes, la parte más importante a nivel estratégico y que guiará al resto de acciones, se resume en el análisis DAFO. Cuyas siglas corresponden a:
- Debilidades: es parte del análisis interno de la empresa. Conocer cuáles son sus puntos débiles, por ejemplo falta de recursos financieros o humanos, ausencia de una marca fuerte, etc. Si conocemos nuestros puntos débiles sabremos por dónde nos atacará la competencia. A largo plazo las debilidades deben de convertirse en fortalezas.
- Amenazas: es parte del análisis externo de la empresa, es decir del entorno dentro del que opera. Un cambio legislativo o un nuevo competidor pueden ser factores externos que hagan peligrar la supervivencia de nuestro negocio.
- Fortalezas: es la otra parte del análisis interno de la empresa. Y conocer nuestras fortalezas, por ejemplo un conocimiento muy especializado, nos permitirá apoyarnos en ella para evitar las amenazas y aprovechar las oportunidades del mercado.
- Oportunidades: es la otra parte del análisis externo del entorno donde opera la empresa. Y en este caso son las posibilidades que podemos aprovechar siempre y cuando hayamos trabajado bien nuestras fortalezas y debilidades. Hay que recordar que a efectos de marketing normalmente hay tantas oportunidades como amenazas e incluso más.